viernes, 27 de abril de 2007

viernes, 30 de marzo de 2007

Historia de lo sucedido


A la una y veintitrés minutos de la madrugada de aquel 26 de abril, un operario de la planta pulsó un botón durante un ejercicio de seguridad; por culpa de un error de diseño común a todos los reactores de grafito soviéticos RBMK, provocó una fisión descontrolada y una explosión de hidrógeno que liberó una nube radiactiva a todo el hemisferio norte del planeta. La radiación liberada fue cien veces mayor a la de las bombas de Hiroshima y Nagasaki juntas. En la explosión, que destruyó completamente el reactor, murieron tres trabajadores de la central, y otros treinta aparecieron en las horas o días siguientes, entre ellos el operario que sin saberlo provocó el accidente.

¿Cuál fue la crisis que se genero por lo sucedido?

La incidencia del cáncer ha aumentado en Rusia, Ucraina y Bielorrusia. Entre 1990 y 2000 se documentó un incremento del 40% de todos los cánceres en Bielorrusia, con aumentos más altos (52%) en la región altamente contaminada de Gomel. En Ucrania se vio un aumento del 12% y en áreas contaminadas de la región de Zhytomir en Ucrania, el número de adultos con cáncer aumentó casi tres veces entre 1986 y 1994. En la región rusa de Bryansk, la incidencia del cáncer aumentó 2.7 veces.
Sólo en Bielorrusia, se han identificado unos 7.000 casos de cáncer de tiroides debidos al accidente hasta 2004. Un estudio reciente ha alarmado de que el cáncer de tiroides en niños ha aumentado 88.5 veces, en adolescentes 12.9 veces y en adultos 4.6 veces. La previsiones para Bielorrusia hablan de entre 14.000 y 31.400 casos extra de cáncer en 70 años. La leucemia empezó a aumentar significativamente en las poblaciones más expuestas unos 5 años después del accidente. Se ha estimado que la población bielorrusa podría llegar a sufrir hasta 2.800 casos extra de leucemia entre 1986 y 2056. De estos, hasta 1.880 serían mortales.

Informes de científicos de lo sucedido

Un nuevo informe de Greenpeace en el que han participado cerca de 60 expertos científicos de todo el mundo (1), denuncia las mentiras del Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre los efectos del mayor accidente nuclear de la historia. "El mundo científico ha demostrado que el OIEA ha tratado de subestimar los impactos sobre la salud humana causados por la catástrofe de Chernóbil. Greenpeace considera lamentable que el afán del OIEA por beneficiar a la industria nuclear se haga a costa del sufrimiento de millones de personas afectadas por la radiactividad de Chernóbil", declaró Juan López de Uralde, director ejecutivo de Greenpeace España.
Este informe de Greenpeace, que incluye diversos estudios, además de información, en parte inédita, de otras investigaciones, refleja que, a pesar de que permanezcan aún muchas incertidumbres sobre las consecuencias completas del desastre de Chernóbil, los datos que ya se conocen demuestran el alto coste para la vida humana de ese accidente nuclear.

Consecuencias de lo sucedido

De los primeros equipos de emergencia que llegaron a la planta, 134 padecieron también los efectos de las radiaciones agudas y 28 murieron en apenas tres meses. Aunque la central se encuentra en la actual Ucrania, el país más afectado por los depósitos de radiación en el suelo fue Bielorrusia, debido a los vientos en esa época del año. El 70 por ciento de los isótopos radiactivos se depositaron en este país, donde el 20 por ciento de los bosques y 6.000 kilómetros cuadrados de tierras de cultivo siguen contaminados. En Ucrania, cerca de 3,5 millones de personas resultaron directamente afectadas por el accidente, incluyendo 1,5 millones de niños. Medio millón de niños siguen viviendo en áreas contaminadas, 73.000 personas padecen invalidez permanente y 91.200 personas tuvieron que ser reinstaladas en zonas seguras. Más de 50.000 kilómetros cuadrados de tierras quedaron contaminados.

¿Que pasa actualmenye en Chernobyl?

El conjunto de datos incluidos en el informe proporciona una amplia visión de la situación actual de los impactos sobre la salud de Chernóbil y concluye que la radiación liberada por la catástrofe ha tenido, además del impacto del cáncer, otros efectos devastadores en la salud de los supervivientes: daños de los sistemas inmunológico y endocrino, aceleración del envejecimiento, trastornos cardiovasculares y del aparato circulatorio, trastornos psicológicos, aberraciones cromosómicas y aumento de las deformaciones en fetos y en niños.
Aparte del impacto directo de la radiación, la salud de la población bielorrusa, ucraniana y rusa se ha visto seriamente afectada por una serie de daños socio-económicos causados por la pérdida de las áreas agrícolas, los realojamientos forzados de unas 350.000 personas, crisis económica y la falta de una adecuada información a los afectados, además de un retraso político en la protección de la víctimas.